Llevo un tiempo leyendo artículos científicos acerca del Cambio climático, especialmente los relacionados con los informes del IPCC y dándole vueltas a la idea de preparar una explicación lo más rigurosa posible, sin grandes tecnicismos, que ayude a llenar el vacío existente entre el creciente conocimiento científico en este asunto, y los tópicos, imprecisiones y fantasías que desbordan los medios.
¿Qué es el IPCC y cuál es su función?
Las siglas IPCC significan Intergovernmental Panel on Climate Change (Panel intergubernamental en cambio climático). Como puede leerse en su sitio web, «al detectar el problema del cambio climático mundial, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) crearon el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) en 1988. La función del IPCC consiste en analizar, de forma exhaustiva, objetiva, abierta y transparente, la información científica, técnica y socioeconómica relevante para entender los elementos científicos del riesgo que supone el cambio climático provocado por las actividades humanas, sus posibles repercusiones y las posibilidades de adaptación y atenuación del mismo.»
Este grupo de experto no realiza investigación sino que basa su evaluación principalmente en la literatura científica y técnica revisada por otros científicos y publicada.
El IPCC consta de tres Grupos de trabajo y un Equipo especial:
El Grupo de trabajo I evalúa los aspectos científicos del sistema climático y el cambio climático.
El Grupo de trabajo II evalúa la vulnerabilidad de los sistemas socioeconómicos y naturales al cambio climático, las consecuencias negativas y positivas de dicho cambio y las posibilidades de adaptación al mismo.
El Grupo de trabajo III evalúa las posibilidades de limitar las emisiones de gases de efecto invernadero y de atenuar los efectos del cambio climático.
El Equipo especial sobre los inventarios nacionales de gases de efecto invernadero se encarga del Programa del IPCC sobre inventarios nacionales de gases de efecto invernadero.
¿Qué dicen los informes elaborados por el IPCC?
En 2007 se publicó el 4to Informe de evaluación del IPCC (llamado AR4 por sus siglas en inglés), consistente en cuatro volúmenes, uno por cada grupo, bajo el título «Cambio Climático». El último volumen es una síntesis, reseña los descubrimientos de los otros tres volúmenes y trata los temas de importancia para los responsables políticos.
Se estructura alrededor de 6 temas fundamentales:
1. Los cambios observados en el clima, y los efectos de cambios del pasado
2. Causas naturales y humanas del cambio climático y su relación con los cambios observados
3. Futuros cambios previstos en el clima y sus impactos
4. Opciones para adaptarse al cambio climático y para mitigarlo, ¿qué respuestas son posibles en 2030?
5. La perspectiva a largo plazo, qué tan rápidas y profundas tendrán que ser las reducciones de los gases de efecto invernadero para limitar el aumento de la temperatura mundial a un nivel determinado, ¿por qué se están intensificando las preocupaciones respecto del clima?
6. Descubrimientos sólidos e incertidumbres clave.
¿Cuáles son los descubrimientos sólidos?
El calentamiento es inequívoco, como lo demuestran observaciones tales como:
Los cambios observados en muchos sistemas biológicos y físicos son coherentes con el calentamiento:
– Aumentos en promedio de la temperatura del aire y del mar y los niveles medio del mar,
– Derretimiento generalizado de nieve y hielo;
– Muchos sistemas naturales en todos los continentes y los océanos están afectados;
70% de crecimiento de las emisiones de gases de efecto invernadero en términos de potencial de calentamiento global entre 1970 y 2004;
Las concentraciones de metano (CH4), dióxido de carbono (CO2) y óxido nitroso (N2O), son ahora mucho mayores que sus área de distribución natural durante miles de años antes de la industrialización (1750);
La mayor parte del calentamiento en los últimos 50 años es «muy probable» que haya sido causado por los aumentos antropogénicos en gases de efecto invernadero.
Las emisiones globales de gases de efecto invernadero continuarán creciendo en las próximas décadas a menos que haya nuevas políticas para reducir el cambio climático y promover el desarrollo sostenible.
Se proyecta un calentamiento de aproximadamente 0,2 ° C por década para los próximos dos décadas (varios escenarios IPCC).
Los cambios de este siglo serán «muy probablemente» mayores que en el s. XX.
Un mayor calentamiento de la tierra que del mar, y más en las latitudes altas del hemisferio norte.
Cuanto más se calienta el planeta, menos CO2 podrá absorber de forma natural.
El calentamiento y el aumento del nivel del mar continuarían durante siglos, incluso si las emisiones de gases de efecto invernadero se redujeran y las concentraciones se estabilizaran, debido a la retroalimentación y el tiempo que transcurre entre causa y efecto.
¿Cuáles son las incertidumbres clave?
Limitada cobertura de los datos del clima en algunas regiones.
Análisis y seguimiento de los cambios en los eventos extremos, por ejemplo, las sequías, ciclones tropicales, de extrema, las temperaturas y precipitaciones intensas (lluvia, el aguanieve y la nieve), es más difícil que la identificación de las medias climáticas, ya que se requieren más registros y más detallados.
Es difícil determinar los efectos del cambio climático en las personas y algunos sistemas naturales, ya que podrían estar adaptándose a los cambios y por otras causas inconexas que podrían ejercer una influencia.
Es difícil estar seguro, a escalas más pequeñas que todo un continente, si es que son causas naturales o humanas las que están influyendo en las temperaturas, porque (por ejemplo), la contaminación y los cambios en el uso del suelo pueden ser responsables.
Todavía hay incertidumbre sobre la magnitud de las emisiones de CO2 debido a los cambios de uso de la tierra, y la escala de metano de las emisiones de fuentes aisladas.
Es incierto cuánto calentamiento producirá a largo plazo cualquier nivel particular de las concentraciones de gases de efecto invernadero, y por lo tanto,
no está claro qué nivel – y el ritmo – de los recortes de emisiones serán necesarios para asegurar un nivel específico de concentraciones de gases de efecto invernadero.
Posibles futuros cambios en las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida son una fuente importante de incertidumbre acerca del aumento del nivel del mar.
Conclusión
Hasta aquí la descripción general del IPCC, y las conclusiones de sus informes. Dejamos para un próximo artículo la exponsición de los datos que aportan dichos informes y las voces que contradicen estas conclusiones.
Muchas gracias por el post. Hay mucha gente hablando de este tema sin conocer los datos.
Estando de acuerdo con prácticamente todo lo que se dice en el informe del IPCC, yo aún tengo dudas respecto de algunos puntos.
Está claro que hay más CO2 en la atmósfera que nunca y que la temperatura ha aumentado muy rápidamente en los últimos años. También está claro que, en principio, y con los modelos teóricos apoyando una conexión entre ambos hechos, parece mucha casualidad que no dependiera una cosa fuertemente de la otra. Es decir, si yo me tengo que jugar dinero, me lo apuesto a que sí, a que el aumento de la temperatura se debe, sobre todo, al aumento de CO2, siendo por tanto, debido al hombre.
Sin embargo, esto no es un argumento científico. O por lo menos no uno muy sólido. Un argumento más sólido que mis ganas de apostar a favor o en contra sería el proporcionado por modelos teóricos fiables. Mi experiencia con modelos teóricos de sistemas complejos (yo he visto los que hay para moléculas biológicas, el clima probablemente sea todavía más complejo) me provoca muchas dudas de que los usados en el IPCC sean fiables. Concluir que es «very likely» algo basado en estos modelos no me parece bien.
Resumiendo, que todo apunta a que sí. Pero estamos lejos de estar seguros. Igualmente hay que tomar medidas y bajar las emisiones de CO2, claro. Por si acaso.
Estoy de acuerdo en lo que dices, en el próximo artículo pensaba analizar un poco el asunto, sin ser experto en ningún tipo de modelos. Pero agregaría algo fundamental, desde mi punto de vista, esta es una buena oportunidad de replantearnos cosas a nivel mundial y simplemente dejar de hacer algunas cosas «de la manera estúpida». Todos hemos visto soluciones terriblemente inteligentes a cuestiones energéticas, de transporte, de producción agrícola, etc. que no pasan de usarse a pequeña escala. En cambio las soluciones destructivas propias de la revolución industrial siguen propagándose.
La lucha entre los cortoplacistas y los largoplacistas siempre ha sido cruenta. Y el libre (libérrimo) mercado no ha ayudado a que los largoplacistas tengan mucha chance. Hay muchos que piensan que el descalabro ecológico y no las desigualdades sociales marcará el fin del capitalismo, por lo menos en su actual forma.
Espero los siguientes posts. 🙂
Muchas gracias por el post. Hay mucha gente hablando de este tema sin conocer los datos.
Estando de acuerdo con prácticamente todo lo que se dice en el informe del IPCC, yo aún tengo dudas respecto de algunos puntos.
Está claro que hay más CO2 en la atmósfera que nunca y que la temperatura ha aumentado muy rápidamente en los últimos años. También está claro que, en principio, y con los modelos teóricos apoyando una conexión entre ambos hechos, parece mucha casualidad que no dependiera una cosa fuertemente de la otra. Es decir, si yo me tengo que jugar dinero, me lo apuesto a que sí, a que el aumento de la temperatura se debe, sobre todo, al aumento de CO2, siendo por tanto, debido al hombre.
Sin embargo, esto no es un argumento científico. O por lo menos no uno muy sólido. Un argumento más sólido que mis ganas de apostar a favor o en contra sería el proporcionado por modelos teóricos fiables. Mi experiencia con modelos teóricos de sistemas complejos (yo he visto los que hay para moléculas biológicas, el clima probablemente sea todavía más complejo) me provoca muchas dudas de que los usados en el IPCC sean fiables. Concluir que es «very likely» algo basado en estos modelos no me parece bien.
Resumiendo, que todo apunta a que sí. Pero estamos lejos de estar seguros. Igualmente hay que tomar medidas y bajar las emisiones de CO2, claro. Por si acaso.
La lucha entre los cortoplacistas y los largoplacistas siempre ha sido cruenta. Y el libre (libérrimo) mercado no ha ayudado a que los largoplacistas tengan mucha chance. Hay muchos que piensan que el descalabro ecológico y no las desigualdades sociales marcará el fin del capitalismo, por lo menos en su actual forma.
Espero los siguientes posts. 🙂
Estoy de acuerdo en lo que dices, en el próximo artículo pensaba analizar un poco el asunto, sin ser experto en ningún tipo de modelos. Pero agregaría algo fundamental, desde mi punto de vista, esta es una buena oportunidad de replantearnos cosas a nivel mundial y simplemente dejar de hacer algunas cosas «de la manera estúpida». Todos hemos visto soluciones terriblemente inteligentes a cuestiones energéticas, de transporte, de producción agrícola, etc. que no pasan de usarse a pequeña escala. En cambio las soluciones destructivas propias de la revolución industrial siguen propagándose.